MADRID, 1 Oct. (EUROPA PRESS) -
La psiquiatra Marisol Roncero Rodríguez, del Centro AdCom IPSM del Hospital General Universitario Gregorio Marañón de Madrid, ha advertido que el fenómeno de compras compulsivas ha aumentado desde la pandemia y requiere de atención y tratamientos específicos, algo en lo que coinciden muchos profesionales de la salud mental y la última evidencia científica.
Desde la Sociedad Española de Patología Dual (SEPD) han puesto el foco en este trastorno caracterizado por la compra descontrolada de objetos innecesarios y que se estima que afecta al cinco por ciento de la población, con motivo de las IX Jornadas AdCom de adicciones comportamentales y patología dual.
Roncero ha afirmado que la prevalencia del trastorno podría haber aumentado en los últimos años. "La accesibilidad, el anonimato y la inmediatez de las nuevas plataformas de comercio electrónico favorecen que la compra sea aún más adictiva", ha explicado Roncero.
En cuanto al perfil de las personas afectadas, ha detallado que cerca del 80 por ciento de los casos se dan en mujeres de en torno a los 45-55 años, pero ha puntualizado que en los últimos años también ha habido un aumento de casos entre adultos jóvenes, sobre todo en la compra 'online'.
ASOCIADO A LA DEPRESIÓN
La experta ha detallado que existe una relación bidireccional entre las compras compulsivas y los trastornos depresivos, dado que en la mayoría de ocasiones las compras no se realizan por una necesidad real, sino para aliviar tensiones y malestares emocionales.
De hecho, se estima que entre un 50 y un 90 por ciento de la población con compra compulsiva presenta también un trastorno depresivo de diferente tipo, como puede ser distimia o depresión crónica, trastorno depresivo mayor o fase depresiva de un trastorno bipolar tipo II, entre otros, lo que se conoce como patología dual.
"La depresión es una enfermedad en la que predominan la tristeza y la apatía, no hay ganas de hacer nada, y el comprar produce un placer inmediato y efímero, por lo que cuando una persona tiene síntomas depresivos esta sensación placentera puede hacerles vulnerables a comprar de forma compulsiva, y a encontrar en esas compras su única fuente de satisfacción", ha argumentado la psiquiatra.
En sentido inverso, también hay personas con trastorno por compra compulsiva que, debido a la adicción a las compras, acaban desarrollando síntomas depresivos. La patología dual complica el tratamiento, según ha apuntado Roncero, que ha señalado aun así que esta situación "no tiene por qué ser peor" siempre y cuando se traten ambos trastornos mentales de forma integral e integrada.
Para ello, ha destacado la necesidad de coordinar el tratamiento farmacológico y psicoterapéutico para la depresión con intervenciones cognitivo-conductuales y motivacionales, así como con estrategias de control de estímulos y prevención de recaídas para la adicción a las compras.