MADRID 12 May. (EUROPA PRESS) -
Las freidoras de aire se han consolidado como una alternativa popular para cocinar de forma más saludable y con un menor consumo de aceite, lo que también contribuye al ahorro económico. Entre los últimos avances en este tipo de electrodomésticos destacan las freidoras con cesta de cristal, una innovación que apuesta por un diseño más limpio, visual y libre de recubrimientos opacos.
Según la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), estos modelos ofrecen ventajas relevantes frente a las freidoras tradicionales, pero también presentan algunos inconvenientes que conviene conocer antes de realizar su compra.
VENTAJAS DE LAS FREIDORAS CON CESTAS DE CRISTAL
Mayor visibilidad durante el cocinado. La cesta transparente permite controlar visualmente el proceso sin necesidad de abrir la tapa, evitando así la pérdida de calor y mejorando la precisión de la cocción.
Limpieza más sencilla. El cristal, al no absorber olores ni manchas como algunos recubrimientos antiadherentes, facilita una higiene más profunda. Además, muchas de estas cestas pueden lavarse en el lavavajillas.
Eliminación de recubrimientos químicos. A diferencia de las cestas metálicas, que suelen incorporar teflón o cerámica, el cristal no sufre desgaste por uso ni libera partículas, lo que lo convierte en una opción más natural.
Compensación del rendimiento térmico. Aunque el cristal no conduce el calor con la misma eficiencia que el metal, los fabricantes diseñan estos aparatos para optimizar el rendimiento, logrando resultados de cocción adecuados, aunque en algunos modelos puede haber un ligero retraso en el calentamiento o la distribución del calor.
DESVENTAJAS A TENER EN CUENTA
Fragilidad del material. A pesar de estar diseñado para resistir el calor, el cristal sigue siendo más delicado que el metal y puede romperse ante golpes o caídas accidentales.
Mayor peso. Estas cestas suelen ser más pesadas que las convencionales, lo que puede dificultar su manipulación diaria, especialmente en cocinas con mucho uso.
Precio superior. Al ser una innovación reciente, la oferta es todavía limitada y los precios suelen ser más altos en comparación con las freidoras tradicionales.
Compatibilidad reducida con accesorios. Algunos modelos con cubeta de cristal pueden no ser compatibles con rejillas, separadores u otros complementos diseñados para freidoras de metal, lo que puede limitar su versatilidad.
¿REALMENTE MERECE LA PENA?
La elección entre una freidora de aire convencional y una con cesta de cristal depende en gran medida de las prioridades de cada usuario. Si se valora especialmente la facilidad de limpieza, un diseño más estético y la ausencia de plásticos o recubrimientos opacos, esta última opción puede resultar muy atractiva. En cambio, si lo que se busca es un aparato más ligero, resistente y con una mayor variedad de accesorios disponibles, los modelos tradicionales siguen siendo una alternativa práctica y versátil.
Para quienes se decanten por una freidora convencional, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) dispone de un comparador actualizado con recomendaciones adaptadas a distintos presupuestos, tamaños y estilos de cocina, además de información sobre dónde comprar cada modelo al mejor precio. Por el momento, las freidoras con cesta de cristal aún no han sido incluidas en su análisis oficial.