Pide una investigación inmediata y avisa que lo ocurrido podría tratarse de un crimen de guerra
MADRID, 19 May. (EUROPA PRESS) -
La organización Amnistía Internacional ha denunciado este lunes que un ataque aéreo de Estados Unidos causó la muerte de decenas de migrantes el pasado 28 de abril al alcanzar un centro de detención del noroeste de Yemen durante su campaña de ataques contra los insurgentes hutíes del país, en lo que se trataría de una violación del derecho Internacional y un posible crimen de guerra.
En marzo de este año, Estados Unidos lanzó una operación de bombardeos contra la insurgencia hutí de Yemen para detener su campaña de ataques contra la navegación en el mar Rojo y contra Israel, una operación que el movimiento yemení (desde hace más de una década fuerza dominante en gran parte del país, comenzando por la capital, Saná) describió como un gesto de apoyo a las milicias palestinas de Gaza en su lucha contra el Ejército israelí.
El presidente de EEUU, Donald Trump, declaró el fin de la ofensiva el pasado 6 de mayo tras anunciar que había cumplido sus objetivos. Las autoridades hutíes habían acusado hasta entonces a Estados Unidos de la muerte de más de 200 civiles en estos ataques, una cifra sobre la que Washington no se ha pronunciado.
ATAQUE A UN CENTRO DE DETENCIÓN
En su informe de este lunes, Amnistía señala que un ataque aéreo alcanzó un centro de detención "bien conocido" en la provincia de Saada. El centro se encontraba en un complejo penitenciario y el ataque norteamericano alcanzó tanto el edificio donde estaban los migrantes como otro anexo.
Amnistía ha redactado este informe con la ayuda de fuentes próximas a la comunidad de migrantes de Yemen, dos de ellas testigos de un "elevado número de fallecidos" que pudieron constatar con sus visitas al Hospital Republicano y al Hospital General de Al Talh, en Saada, donde pudieron observar al menos "más de una veintena" de migrantes de origen etíope con "amputaciones y fracturas en sus cuerpos".
Estas fuentes, más personal del Comité Internacional de la Cruz Roja, han confirmado que el ataque dejó tantos muertos que "las morgues de los hospitales se quedaron sin espacio".
La ONG también ha trabajado con imágenes por satélite y vídeos de las secuencias de rescate de los detenidos, bajo los escombros del centro. Los expertos en armas de Amnistía Internacional analizaron fotos de los restos de las armas utilizadas en el ataque e identificaron fragmentos de al menos dos bombas de pequeño diámetro GBU-39 de 113 kilos guiadas con precisión.
El Mando Central de EEUU no anunció el objetivo del ataque, pero un portavoz del Pentágono ha indicado a Amnistía que ya está en marcha una evaluación del incidente que, pide la ONG, debe ser publicada "sin demora".
La secretaria general de Amnistía Internacional, Agnès Callamard, ha condenado sin paliativos este ataque estadounidense contra este centro, poblado por "cientos de migrantes" detenidos por los hutíes y denunciado que "la pérdida de vidas ha sido tan numerosa que lo ocurrido plantea serias preocupaciones sobre si Estados Unidos cumplió con sus obligaciones en virtud del derecho internacional humanitario, incluidas las normas sobre distinción y precauciones".
Amnistía recuerda que, en virtud del derecho internacional humanitario, las fuerzas atacantes tienen la obligación de hacer todo lo posible para distinguir entre objetivos militares y civiles, verificar si su objetivo previsto es un objetivo militar y cancelar el ataque en caso de duda.
Si se determina que se han producido daños a la población civil, las víctimas y sus familias deben recibir una reparación integral por las violaciones del Dderecho Internacional Hhumanitario. Además, si las investigaciones determinan que hubo ataques directos contra civiles y bienes de carácter civil, o ataques indiscriminados contra objetivos militares y civiles sin distinción, que causaron la muerte o lesiones a civiles, éstos deben investigarse y considerarse violaciones del Derecho Internacional y posibles crímenes de guerra.
Por todo ello, remacha Callamard, Estados Unidos debe llevar a cabo una investigación "pronta, independiente y transparente sobre este ataque aéreo y sobre cualquier otro ataque aéreo que haya causado víctimas civiles, así como aquellos en los que se hayan podido violar las normas del derecho Internacional humanitario".