MADRID 14 May. (EUROPA PRESS) -
La Misión de Determinación de los Hechos de la ONU sobre Venezuela ha expresado este miércoles su "profunda preocupación" por la práctica de recluir "en condiciones de aislamiento e incomunicación" a personas contrarias al Gobierno de Nicolás Maduro, ya que puede ser constitutivo de un delito de desaparición forzada y, por extensión, un crimen contra la humanidad si se realiza de forma sistemática.
Los expertos de Naciones Unidas, que reclaman vigilancia ante la gravedad de la situación de los Derechos Humanos en Venezuela, consideran que existe un "plan deliberado" del "aparato represivo" para silenciar a la disidencia y, al mismo tiempo, "infundir miedo" en el conjunto de la población, con la connivencia de las principales instituciones judiciales y de seguridad.
La presidenta de la misión, Marta Valiñas, ha advertido de que esta "práctica perversa e ilegal" puede constituir un crimen internacional, en un contexto marcado además por la "complicidad" de los tribunales, al asegurar con su inacción "la impunidad de estos crímenes y graves violaciones a los Derechos Humanos".
Naciones Unidas entiende que en Venezuela no existe a día de hoy un verdadero Estado de derecho, como quedaría de manifiesto en el caso de los 'habeas corpus'. Según la misión, en al menos 20 casos los recursos de este tipo no fueron recibidos, fueron rechazados o no obtuvieron respuesta alguna por parte de los tribunales.
Otra de las integrantes de la misión, Patricia Tappatá, ha señalado que esta "resistencia" del aparato judicial supone "un grave incumplimiento de los deberes de sus funcionarios y un acto de complicidad", toda vez que "el 'habeas corpus' ha salvado vidas y contribuido a la investigación del comportamiento de gobiernos y grupos paraestatales que actúan en la ilegalidad y el secreto".
La misión también ha aprovechado este último informe para volver a reclamar la liberación incondicional de todas las personas detenidas arbitrariamente, una petición que lanzó el martes el Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Volker Turk.